Relata la vuelta a la vida de pareja y familia, después de un fin de semana de conciertos. Los porvenires de la noche y sus tentaciones en los momentos de euforia y subidón, después de bajar del escenario. Dejarse llevar por la vida, recopilando anécdotas y emociones que luego se transforman en canciones. Es la cara B del oficio, el que muchos no ven y pocas personas acompañan y apoyan aunque a veces la tierra tiembla. Pertenece al género canción a medio tiempo con matices Stoneanas. Envuelta en sonidos clásicos de teclados y un riff de guitarra muy cantable. |
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